La Guerra Civil: un día de dominio felino (parte 1)

Las gradas, en comparación del día anterior estaban vacías, solo una gran e importante razón impedía que hasta el más acérrimo de los fanáticos del Diablos o del Tigres estuviera presente en esa ocasión, se trataba del 10 de mayo: día de las madres.

Entre flores, dulces, regalos, poemas, canciones, comidas especiales, etc, se vive este peculiar día donde cada mexicano hace el esfuerzo (o el gusto, depende el caso) de pasar el día con aquella señora que se encargó de cargarlo y traerlo al mundo.

Y el béisbol no podría ser la excepción, en esta soleada tarde de primavera en el oriente de la cuidad de México, la presencia de la madre estaba por todos lados, ya sea que esta acompañara a su hijo que juega en el diamante, desde las gradas, hasta las aficionadas que no tenían ganas de perderse uno de los juegos más importantes de la temporada.

La directiva del Diablos en esta ocasión tampoco se desafanó de las celebridades, ya que entre los descansos entre inning e inning, se dedicaron a hacer concursos donde las reinas del hogar recibían un horno de microondas en caso de que resultaran ganadoras, pero por el mismo hecho de ser madre, a la entrada éstas recibían un delantal de cerveza Corona y el logo de la pandilla escarlata.

Lo importante (aparte del día) es que la gente sigue asistiendo al béisbol, sin tomar en cuenta las cantidad de adversidades que esto conlleve.

Doña Isabel, que tenía rato ya sin venir al parque de pelota comenta:"El Foro Sol está bien para conciertos, pero no para el beisbol", insiste. Ella vino al primer partido, el ya lejano 2 de junio de 2000, y no regresó hasta ahora. Molesta, enumera: “asientos incómodos, el largo trayecto para entrar, la inseguridad y las más de 100 escaleras ‘empinadas’ ” la habían alejado hasta este momento.

Otro de estos fanáticos, don Sergio, argumenta que es “Diablo de corazón”, ya que asiste constantemente al béisbol: desde que se jugaba en el Parque Delta y después en el Parque del Seguro Social (escenarios ya extintos)

“Me tocó ver figuras del diablos como el "Diablo" Montoya, (Ramón) Arano, Felipe Montemayor”. Con respecto al partido esto comenta. “esta dura la cosa por que el Tigres viene jugando mal y el Diablos no afloja, ya que jugó con Yucatán y empató debido a que el tercer juego se canceló por lluvia”

Después salió a colación como eran sus tiempos al momento en que iniciaba a ver el juego de pelota, desde los 12 años

“Cuando era (tiempo del parque) Delta, no había tanto fútbol como ahora, había campos de béisbol llaneros,” argumenta y comentó tristemente el como se vino abajo el (hasta entonces) rey de los deportes “con la popularización del fútbol y luego la huelga de los ochentas,”, es algo que a pesar de ser duelo clásico se nota en la baja entrada que hay por lo regular en el parque capitalino “pero el béisbol sigue” admite alegremente.

Pero en esa ocasión, no solo las mamas fueron galardonadas, por parte de la “Porra Brava” de los Diablos Rojos del México, Daniel Fernández, gran jugador e icono de la franquicia, recibió un sencillo pero cálido reconocimiento por su brillante carrera como jugador, a la par que le desean mucho éxito en su cargo nuevo, como entrenador de esta escuadra.

Esta tarde abrió desde el montículo de los diablos el número 37 Arturo López y por los del Caribe Óscar Bustillos

Luego del calentamiento y la ceremonia de la primera bola, que en este caso fue lanzada por el director del Instituto del Deporte del Distrito Federal, Pablo de Antuñano, el umpire principal cantó la voz de Play Ball, de este modo se inicia la magia en el Foro Sol...

Continuará

Fotos: Hector Mauro A.