jueves, 15 de mayo de 2008

La Guerra Civil: un día de dominio felino (parte 2)

A las 4:02 de la tarde se da el primer lanzamiento del brazo de Arturo López, aquella primera entrada fue complicada ya que recibió dos hits y la carrera de la quiniela del bate de Edgar Guzmán, mientras que los diablos se fueron en blanco.

Luego de una entrada, el score era 1-0 en favor de los visitantes. En esta ocasión la porra del Tigres era poca, pero ruidosa, y eso quedaría evidenciado más adelante.

Para el segundo rollo caería la segunda del tigres, en esta ocasión por via fly de sacrificio de Flavio Romero al izquierdo, la cosa se le complicaba en el cerrito a López que aguantó la risa por solo tres entradas y se llevó un sendo descalabro. Para su mala suerte, de nuevo los diablos se iban con las manos vacías.

La tercera entrada sería el acabose del abridor escarlata, ya que Edwards Guzmán, ponía la tercera rayita de los tigres y fin del cuento para A. López, entraría al relevo Francisco Córdova, que controló por un momento al ataque felino, para después recibir la 4º, 5º y 6º carrera de los visitantes.

En esta ocasión el diablo se enfureció y quiso revertir la situación, Roberto Saucedo conecta hit con las bases llenas e impulsa la primera carrera de los diablos, Daniel Fornés con corredores en todas las bases, recibe base por bolas y de ese modo entra una carrera más, ahora “de caballito” (como se le conoce en el argot beisbolero cuando hay bsae por bola con casa llena) y era todo para Oscar Bustillos.

Su relevo (Cecilio Garibaldi) recibe sencillo impulsor como bienvenida de Miguel Ojeda y con el turno de Carlos Valencia se acaba la tortura escarlata, 6-3 luego de tres completas.

La cuarta alta sería leve (dentro de lo que cabe) para los pingos, ya que Edwards Guzmán con un sencillo impulsa la séptima carrera a la par que los cañones rojos son silenciados por un trabajo orquestal de Garibaldi.

A la altura del quinto rollo, la guerra de porras le pondría un ambiente más agradable a las galerías del foro capitalino, ya que al momento en que terminaba la de tigres, la del diablos respondía al instante, ya sea con otra porra o con sonoros silbidos, tratando de mostrar quien es el local.

En esta entrada donde ambas escuadras colgaron donitas en la pizarra, solo cabe destacar el fin de la actuación de Francisco Córdova con el ingreso de Heriberto Ruedas, entramos al cenit del encuentro. Al mismo tiempo que el sol se escondía detrás del home, el score 7-3 evocaba un posible desastre escarlata...

Fotos: Héctor Mauro A.

1 comentario:

Raúl Luna dijo...

Héctor,

Buena crónica.

Saludos
RL